Todos conocemos la existencia de la psicología del deporte y eso es algo que debemos utilizar para prepararnos para hacer una ruta como puede ser el Camino de Santiago. Aunque se puede hacer en cualquiera de las etapas que queramos, sí debemos tener cierta preparación mental para no desfallecer cuando haya partes de la ruta muy duras.

Preparación mental, clave de una buena ruta en bicicleta

Al igual que en cualquier otro momento, cuando estamos en la bicicleta es imposible no pensar o sentir emociones y aunque en ocasiones podemos controlar ambas, cualquier pensamiento negativo puede influir negativamente en nuestras emociones y hacernos más dura la ruta.

A veces podremos controlar los pensamientos y las emociones aunque seguramente que en otras ocasiones no sabremos cómo continuar, por eso es tan importante el entrenamiento psicológico más adecuado y las estrategias que permitan el control de pensamientos y emociones, porque también pedalean con nosotros.

Para una buena preparación mental para hacer el Camino de Santiago en bicicleta es importante la planificación de las etapas, siempre acorde a nuestras capacidades físicas. Por ello debemos ser sinceros con nosotros mismos y ser consecuentes con la planificación, sin obsesionarnos con hacer etapas o con llegar cuanto antes a Santiago de Compostela.

Dado que no necesitamos ir con presión mental, lo más recomendable es ir tomándoselo con calma y haciendo tantas paradas como estimemos oportunas, sin presión, disfrutando de los paisajes, monumentos y todo lo que poco a poco vayamos encontrando durante nuestra ruta.

Otra cuestión que debemos tener muy en cuenta es que el Camino de Santiago no es una competición y no debemos ir a un ritmo superior al que podemos ir, por ello la preparación mental nos ayudara a gestionar mejor nuestra energía sobre la bicicleta e ir más cómodamente en nuestra ruta en bicicleta.