Si quieres disfrutar de un verano diferente, hacer el Camino de Santiago en bicicleta puede ser una de las mejores opciones para hacer tanto en solitario como con amigos. Si te animas, debes saber que los mejores meses en los que hacer esta ruta con tu bicicleta es entre los meses de mayo y septiembre, por lo que estás a tiempo de preparar una ruta entera o algunas de sus etapas finales.
Para hacer esta ruta debes tener muy presente la clase de bicicleta que vas a utilizar y aunque existen muchos modelos diferentes, no todas servirán para este propósito. Por ejemplo, una bicicleta de paseo, por buena que sea, no es recomendable o una fixie por razones obvias.
Da igual la ruta que elijamos, todas tienen subidas y bajadas y no todas van a tener el mejor estado , por ello, la más recomendable es una bicicleta de montaña, a la cual tendremos que hacerle una buena puesta a punto en profundidad, revisándolo todo y cambiándolo si fuera necesario, sobre todo cubiertas, radios, ejes, frenos y cambios.
En lo referente al equipaje que debemos llevar con nosotros, lo más aconsejable es no ir demasiado cargados y para no forzar la espalda con una mochila, lo que podemos hacer es colocar unas alforjas a cada lado de la bicicleta, con lo que tener una mejor estabilidad y comodidad a la hora de rodar.
Si vamos muy cargados de equipaje, siempre podemos colocar una bolsa en el manillar, pero aquí debemos guardar lo que menos espacio ocupe y menos pese, porque podría entorpecer la forma de conducción.
Para finalizar, otro punto a tener en cuenta sobre nuestra bicicleta es que debemos colocar un sillín de silicona o una funda especial dado que pasaremos muchas horas sobre él y las molestias que puede provocar un sillín normal harán que sea muy difícil hacer una ruta entera.